Hola. Marketing cotidiano para todos. ¿Qué
quiero decir? Nos hemos metido en la misión de tratar de explicar qué es y cómo
funciona el marketing actual. Más que tratar de dar una serie de lecciones de
forma sistemática, creo mejor ir poniendo una serie de ejemplos y casos
explicativos.
Pero lo que no les he explicado es que soy malo
malísimo en esto del marketing. En vez de utilizar las técnicas habituales que
se aplican en la publicidad (no confundir con el marketing)[1] voy a hablarles de las
características técnicas del producto, composiciones químicas, aspectos legales
y origen de la distribución. Si después de todo aún tienen el irresistible, el
irracional impulso de comprar un perfume, pueden hacerlo en el siguiente enlace:
(https://www.essensworld.com/940079678) a 21,50 € el frasco de 50 ml. Todos los
beneficios irán destinados a mi peculio particular.
Como ya habrán olido, como primer ejemplo vamos
a tratar el caso de los aromas. Y no digo perfumería… porque no son perfumes.
¿No? Veamos. Cojamos algunos frascos de 50 ml. de alguna marca conocida
adquirida en grandes almacenes de renombre. Veremos unos precios de entre 70 y
90 €. Y estaremos creídos que se trata de perfumes. Pero si miramos el frasco
detenidamente, ¿pone perfume por alguna parte? No. Le podemos dar vueltas al
frasco o a la caja. Pero si miramos el fondo del frasco podremos observar que
pone “eau d’toillete”. ¡Será lo mismo! Pues no.
Cada denominación técnico-comercial de los
aromas o fragancias responde a una determinada concentración de aroma esencial
puro en disolución en agua y alcohol. Puede consultarse en Internet. El eau de
toillete tiene una concentración mucho menor que el perfume. Las
concentraciones serían las siguientes:[2]
Eau de solid o splash: 1% de concentración.
Eau de cologne, agua de colonia: hasta un 3-6%.[3]
Eau de toillete, agua de baño: hasta un 13-16%.
Eau de parfum: hasta un 16-18%.
Parfum, perfume: a partir de un 20% de
concentración.
Bueno. Pero el aceite esencial puro “no será
igual”. El de estas grandes marcas será diferente de esas “baratas”, “de
imitación”. Pues no. Porque quizá estén creídos que esas esencias estarán
creadas en París de la France, Bélgica o Suiza. Pues tampoco. Las esencias
puras se adquieren en Turquía, a la empresa Seluz (http://www.seluz.com/),
referencia mundial en esencias, junto con Egipto. Seluz es el proveedor de
grandes marcas como Chanel, Dior o Paco Rabanne.
Pero aún hay más. Hay que rentabilizar aún más
los procesos. Como la concentración de aceite esencial puro es menor, la
duración de esa fragancia es menor. Para prolongar su efecto, se recurre a
fijadores químicos para prolongar en el tiempo la sensación olfativa. ¿Cuál es
el fijador de los perfumes? La dimeticona copoliol[4] o Abil Grass, una silicona
usada en una concentración del 0,5%. Y aún hay más. El proceso natural de
maduración de la esencia pura en alcohol y agua, que dura unas ocho semanas,
puede reducirse a solo dos semanas utilizando más productos químicos.
Todo para qué. Reducir costes. En realidad el
coste de fabricación del frasco y del contenido rondan los cuatro o cinco
euros. Y el coste de fabricación del frasco es superior al del contenido. Y con
dicho importe, la empresa turca Seluz “tiene beneficios”. Luego todo el coste
del producto hasta el precio final es marketing (diseño del frasco, publicidad,
distribución y grandes beneficios), todo lo cual gastamos y pagamos
gustosamente por un producto de calidad… de pega. Yo, vendiendo a 21,50 € el
frasco, obtengo beneficios; la empresa Essens, obtiene beneficios; la empresa
Seluz, obtiene beneficios. ¿Qué beneficios se obtienen vendiéndolo a 80 euros?
Si quieres adquirir un perfume real, con una
concentración del 20% de aceite esencial puro, sin lacas o fijadores, macerado
naturalmente, puede hacerlo en este enlace de la empresa Essens (https://www.essensworld.com/940079678).
Si quieres preguntar algo o que te envíe más
información, rellena el formulario de contacto. Y muchas gracias.
[1] Tradicionalmente, el marketing
o mercadotecnia se ha aplicado al producto, precio, distribución y punto de
venta.
[2] Pueden variar según marcas.
[3] Decimos cologne aunque
todos sabemos que Colonia (Köln) está en Alemania.
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